Historia

LOS 70

Al principio de los años setenta por iniciativas privadas se construyeron los seis primeros edificios de protección oficial, con el objetivo de seguir construyendo una ciudad dormitorio, ya que existían muchos inversores detrás de todo un proyecto, pero..., al final, todo quedó en una triste realidad, ya que la empresa constructora “Pavitesa de Barcelona y áreas metropolitanas” dieron a la quiebra.
Los terrenos del barrio en su gran mayoría eran de propiedad del empresario Masdefiol y que de alguna forma, un tal señor Manolo Jiménez los compra, edifica algunos bloques del primer proyecto pero no los completa ni urbaniza; de esa forma se instalaron los nuevos vecinos hacia el año 1973-74, que se encontraron sin luz pública ni pavimento en las calles. Ante el problema los vecinos no tuvieron más remedio que organizarse para definir sus  intereses , ya que el ayuntamiento y el tal señor Manolo Jiménez  se desentendieron de la situación del barrio, por lo que se iniciaron las primeras manifestaciones vecinales.
Impidieron nuevas construcciones, pusieron barricadas para cortar el tráfico y ocuparon la oficina del empresario Manolo Jiménez; finalmente este  decide urbanizar lo justo, pero a cambio de que una persona del barrio le firmara un papel donde se le diera total libertad para construir nuevamente en el año que quisiera... Edifico los dos últimos pisos.
Después de conseguir las mejoras , se constituyó la A.VV. Xúquer en el año 1976, desde la cual, Juan Torres el presidente de la misma, fue solucionando sus propios problemas, transformando unos terrenos que se hubieran perdido en un parque infantil, donde todos los vecinos participaron aportando quinientas pesetas , de las cuales una parte fue para comprar árboles y otra para equipar un local. Ese local se convirtió en un bar para seguir generando beneficios y finalmente comprarlo para convertirlo en el casal de barrio.
Desde la asociación se hicieron pequeñas obras de mejoras para el barrio, como el pintado de los actuales aparcamientos de nuestro barrio, así como mejorar el local de la A.VV, igualmente apoyaron distintos problemas que hubo con las ventas de pisos que quisieron embargar algunos inmuebles, habiendo sido de acierto la actuación de la entidad.

LOS 80

Ya a principios de los años 80, en una de las varias asambleas generales del barrio, hubo desacuerdos entre los vecinos, al haber entre los mismos intereses particulares; siendo el mayor problema el comprar el actual local, que hizo que la unión vecinal se fuera al traste.
Hasta la fecha hubo dos cambios de presidente, siendo el segundo el Sr. Valentín, que siguió organizando la fiesta mayor, pero que tubo que dejar el puesto ya que se tuvo que trasladar al barrio de Can Palet.

Años más tarde el presidente fue el Sr. Manolo Jiménez, apodado “El socialista” (es apodado así ya que en esta historia existía otro Sr. Manolo Jiménez, el contratista), el cual mantuvo la asociación con poca actividad, pero consiguió mantener el local y convertirlo en propiedad del barrio. Dentro de la normalidad política de la ciudad se fue haciendo lo mínimo, pero sin olvidar que la A.VV tendría que seguir actuando. El socialista mantuvo la fiesta mayor del barrio...

Unos cuantos años después dos vecinos viendo que el barrio quedaba encajonado con la futura construcción de la N–150 discutieron de que manera los vecinos podían hacer que el barrio no se degradara antes de que fuera demasiado tarde; sacaron como objetivos comunes la necesidad de equipamientos para el barrio.
Estos dos vecinos, Pedro Ballesta y Bartolomé Zamora, obligan al Sr. Manuel Jiménez (el socialista) a celebrar una asamblea general del barrio, donde el orden del día fueran los problemas generales del barrio en esos momentos. De esta asamblea salió como punto fuerte obligar al “Socialista” a dimitir y a celebrar elecciones para elegir una junta nueva.
Solamente hubo una candidatura por parte del Sr. Pedro Ballesta y Bartolomé Zamora, que a pesar de ser la única, hicieron su campaña de presentación;  obtuvieron una gran cantidad de votos por parte de todos los vecinos. Esta nueva junta formada por las dos personas anteriormente nombradas y por otros tantos vocales, mantuvieron muchas conversaciones con todas las áreas del ayuntamiento y poco tiempo después se comenzaron a observar las primeras mejoras.

LOS 90

Al construir la N-150 no se puso atención al proyecto y se olvidaron por completo del barrio, no respetando la opinión y las reivindicaciones de todos los barrios afectados, haciendo de la obra una carretera ilegal por no haberse cumplido la exposición pública del proyecto donde se hubiera podido opinar sobre el mismo.
La variante se construyo y al finalizar se dieron cuenta de que el barrio de Xúquer se había quedado encajonado y prácticamente  incomunicado, por lo que se aprueba construir una pasarela a la altura del barrio sobre la N-150.
El Sr. Pedro Ballesta tuvo unas actuaciones positivas en política de barrio, motivando a muchos vecinos a que luchando unidos con objetivos homogéneos y concretos siempre se puede conseguir lo que se desea; nos enseño a tomar acuerdos, siempre en asambleas, bien con la junta o con todo el barrio, con sus actuaciones y el apoyo de los vecinos “saco” el barrio a la calle cortando la Av. del Vallès y la variante N–150, para reivindicar equipamientos, de esta manera se consiguió la promoción del proyecto especial para el barrio. También hizo que los vecinos salieran a la calle con velas encendidas para quejarse de los cortes de suministro de electricidad, con lo que consiguieron que ahora, unos cuantos años después, hayan cambiado todas las farolas, mejorando considerablemente la iluminación y evitando más cortes eléctricos.

Tres años después de la decisión de construir una pasarela comunican al diario local de Terrassa que la pasarela es innecesaria y que al final no la construyen. En ese momento la junta actual formada por el Sr. Pedro Ballesta decidieron celebrar una asamblea general, donde se decidió cortar la variante para poder pasar por ella. Como resultado el proyecto siguió hacía adelante, celebrando una reunión entre la A.VV. Xúquer y la Generalitat de Catalunya donde se escribió por escrito que en el año 1999 se elaboraría el proyecto y en el año 2000 se construiría.
Estos resultados los continuaron la nueva junta, ya que se volvió a cambiar la presidencia de la misma en el mes de abril de 1999, donde, Bartolomé Zamora, que en la junta anterior había sido vicepresidente, continuó con la línea de su antecesor. Cabe destacar que cuando se hizo el cambio en asamblea general de barrio, también se iniciaba la construcción del plan especial de Xúquer.